Sí, me pasa.
Cuando digo más de lo que debería haber dicho.
Cuando me justifico en representación de un yo engreído.
Cuando escucho demasiado.
Cuando pienso y pienso perdiéndome en lo que no tiene importancia.
Cuando…
Sí, me pasa.
Cuando digo más de lo que debería haber dicho.
Cuando me justifico en representación de un yo engreído.
Cuando escucho demasiado.
Cuando pienso y pienso perdiéndome en lo que no tiene importancia.
Cuando…
En mi caso: Otro más.
Me encuentro ocupando cada segundo hurtado de lo importante con la escritura; en pensamiento, palabra, letra o imaginación…
No me detengo hasta que castiga la conciencia, el instinto o muchas veces: El cansancio.
Paloma, ¿la inspiración desciende desde los ángeles o erupciona con los demonios?
Me gustaLe gusta a 2 personas
Hola Bro! Buena contribución! Creo que la inspiración viene de absolutamente todo. No tienen los derechos reservados ni los ángeles ni los demonios 🤔
Me gustaMe gusta
Cuando pido mas de lo que doy
Enviado desde mi iPhone
Me gustaLe gusta a 2 personas
Cierto, también me pasa. Gracias por participar! ☺️
Me gustaLe gusta a 1 persona
Bueno, todos tenemos días así. O así. O de otro modo 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona
Es verdad. Yo cuando los tengo así me agobio un poco 😏
Me gustaLe gusta a 1 persona
Yo, en eso de haber dicho más de la cuenta, ojalá no pudiera verme al espejo ni de pasada…
Creo que todos tenemos esos momentos…
Lo bueno es que nos reconciliado rápido con nosotros mismos.
Un gusto ha sido llegar a tu blog Paloma.
Feliz viernes.
Me gustaLe gusta a 2 personas
Tienes razón, lo bueno es que después de chocarnos contra la pared de narices, nos recuperamos.
Mil gracias por participar Viviana. Me alegro de que te haya gustado. Un abrazo
Me gustaLe gusta a 2 personas